¿Cómo se comportará el mercado sin el apoyo de liquidez de los bancos centrales?
Redacción Mapfre
Las caídas generalizadas en las bolsas durante el cuarto mes del año han roto la tendencia histórica registrada en dicho mes (la rentabilidad media en los mercados se aproximaba al 2%). Abril, que solía ser complaciente con los inversores, ha visto cómo el Nasdaq, por ejemplo, registraba una caída de más del 13% (el peor mes desde la crisis de 2008), empujada principalmente por las FAAMNG (las seis principales compañías del selectivo tecnológico). Los paneles en rojo se replicaron en Wall Street, donde la incertidumbre ha campado a sus anchas: el S&P 500 registró su peor balance mensual desde el estallido de la pandemia, con un desplome superior al 9%.
Pese a todo ello, Estados Unidos parece estar más cerca de la paridad del dólar respecto al euro: el valor relativo de la divisa europea ha perdido un 5% respecto al billete norteamericano en el último mes. Para Alberto Matellán, economista jefe de MAPFRE Inversión, esto viene motivado porque “la política monetaria americana va por delante de la europea y ya están restringiendo la cantidad de dólares en el mercado; además, el crecimiento está cayendo más rápido en la eurozona”. Sin embargo, este fortalecimiento del dólar no es, a su juicio, indicativo de que el euro se esté depreciando.
Esta retirada gradual de liquidez (acompañada además de subidas de tipos) que apunta el experto por parte de la Fed tiene preparados todos los mecanismos para ponerse en marcha: Jerome Powell ha seguido la hoja de ruta esperada del banco central americano y ha afirmado que a partir del 1 de junio comenzará la reducción del balance de 9 billones. En esta línea, ha anunciado además una subida de 50 puntos sobre los tipos de interés (la mayor subida en 22 años, cuando Alan Greenspan era el presidente del organismo), algo que "el mercado ya habría descontado, no descartando incluso los 75 puntos". El mercado está asumiendo que los tipos seguirán subiendo en los próximos meses para contener la inflación, si bien reconoce Alberto Matellán que la atención de los inversores debe estar sobre el nivel de liquidez que marque la Reserva Federal en adelante.
El consenso de analistas asume en este sentido que tarde o pronto el BCE dará los mismos pasos que su homólogo americano. Según Daniel Sancho, responsable de inversiones en MAPFRE Gestión Patrimonial, “la retirada progresiva de la liquidez y la anticipada subida de tipos es lo que puede generar riesgo y de alguna forma afectará a la renta variable. Pero es algo sano y necesario. Debemos dar un paso atrás y reconocer el nuevo escenario monetario”. Después de años de políticas acomodaticias, la clave, por tanto, estará en ver “cómo se comportará el mercado sin el apoyo de liquidez”, estima el experto de MGP. Pero, al mismo tiempo que este contexto puede generar volatilidad, Daniel Sancho cree que “se pueden presentar oportunidades”.
El nuevo paquete de medidas contra Rusia no beneficia a nadie
La tensión geopolítica en Europa no es ajena a las políticas de gobiernos y bancos centrales. Y es que el famoso dicho de “compra con el rumor, vende con la noticia” está, una vez más, más cerca de cumplirse: el precio del petróleo (una variable terriblemente volátil en estos momentos) retomaría una nueva dinámica alcista tras el anuncio de un posible paquete de medidas sobre el crudo ruso. De hecho, el último informe Panorama Económico y Sectorial, elaborado por MAPFRE Economics, ya anticipaba un petróleo por encima de los 100 dólares hasta 2023.
Pero la aprobación de nuevas sanciones es, sin embargo, mala también para el que la ejecuta: “Habría que ver si tienen sentido o no en el largo plazo, pero está claro que afectará a la actividad de la zona euro”, advierte Alberto Matellán, que apunta, además, que el problema podría desembocar, en última instancia, “sobre los ciudadanos, inversores y analistas”.
Además de las noticias negativas que han venido desde los selectivos, el riesgo de que los precios de la energía repercutan aún más sobre una inflación desbocada y, por ende, sobre la capacidad adquisitiva de los ciudadanos, no debería ser cuestión de preocupación para los inversores de cara a la confección de sus carteras. “Durante el mes de abril perdieron casi todas las clases de activos, pero son circunstancias del mercado. No deberíamos fijarnos en un mes concreto ni en el día a día, ya que esto genera bandazos anímicos indeseados”, sentencia el economista de MAPFRE Inversión.