La inflación condicionará los movimientos del BCE
Redacción Mapfre
La inflación en la eurozona, pese al notable descenso que ha registrado desde el pico de 2022, sigue sin descender al ritmo deseado por el Banco Central Europeo. Tras conocer ayer que la inflación en Europa se situó en junio en el 2,5%, Alberto Matellán, economista jefe de MAPFRE Inversión, ha explicado que este nivel, aunque es “razonable”, va a seguir limitando al BCE para llevar a cabo futuras bajadas de tipos de interés.
“La inflación se resiste a bajar, eso es lo que marca todo”, ha resumido Matellán en una entrevista en Radio Intereconomía. Aunque el avance de los precios ha retrocedido una décima frente al mes anterior, “bajarla más es difícil”, por tratarse principalmente de una inflación de oferta en la que hay “una parte muy importante que está fuera de nuestro control”. Esto “condiciona los movimientos del BCE”, ha apostillado Matellán
En esa línea, las declaraciones de los banqueros centrales de esta semana, también en Estados Unidos, “vienen a decir que sigue habiendo un problema”, por lo que quieren “esperar y ver” la evolución de las variables macroeconómicas. Esto supone, en opinión de Alberto Matellán, que “el escenario de bajada de tipos puede ser más lento, pero no un cambio general”.
Por otro lado, las elecciones en Francia han tenido impacto en el mercado, pero este se ha ido moderando a lo largo de la semana. “Los mercados cotizan que el cambio posiblemente no sea tan extremo como se había planteado”, cree el economista jefe de MAPFRE Inversión. Hasta pasada la segunda vuelta de las legislativas francesas seguirá habiendo “mucho ruido”, ha pronosticado, pero “lo que importa realmente es lo que vayan a hacer, y eso lo veremos después” de los comicios.
Del mismo modo, este jueves el Reino Unido vota a su próximo primer ministro, una elección que puede generar cierto impacto, pero “bastante limitado en el tiempo”, sostiene Matellán, porque las políticas económicas probablemente no serán “de ruptura radical”.
Los resultados empresariales conocidos esta semana no son “todo lo buenos que nos gustarían”, ha afirmado Matellán, un descenso que no obstante está en línea con lo previsto. El “débil” crecimiento está basado principalmente en los servicios, con una industria que “no tira”, aunque el economista estima que al sector industrial sí llegará una mejora “en los próximos meses”.
Por último, el petróleo se encuentra en máximos de los últimos dos meses, con el barril de Brent en torno a los 57 dólares, un alza que se explica por tres factores:
- Cambio estructural de los oferentes. Hasta hace poco las reuniones de países productores, como la OPEP, llegaban a conclusiones que luego no se materializaban, pero ahora están actuando de manera más coordinada.
- Ligera mejora del crecimiento económico.
- A corto plazo, tensiones en ciertas zonas geográficas.
Todo esto empuja al alza el precio del crudo, pero “por tiempo limitado”, considera el economista jefe de MAPFRE Inversión, por lo que el petróleo “podría estabilizarse dentro de poco”.