“El sector de gestión de activos se ha visto beneficiado indirectamente por la pandemia”
Redacción Mapfre
MAPFRE lleva la sostenibilidad en su ADN desde hace más de medio siglo y, como no podía ser de otra manera, ese compromiso se ha trasladado a la inversión de forma progresiva en los últimos años. José Luis Jiménez, director general de inversiones del Grupo, ha sido uno de los principales impulsores de esa apuesta por la Inversión Socialmente Responsable desde su llegada en septiembre de 2015 y, actualmente, MAPFRE AM, la mayor gestora independiente de activos de España, pero con presencia en 25 países, se ha situado como un referente. El directivo explica cómo la pandemia ha acelerado esa necesidad de no sólo mirar la rentabilidad financiera, sino también la rentabilidad social.
Vamos a llegar a mitad del año, ¿qué balance haría del sector de gestión de activos después de un 2020 marcado por los peores episodios de la pandemia?
La verdad es que si hacemos caso de los datos de INVERCO(los fondos de inversión ya canalizan un 14,8%del ahorro financiero de las familias), se puede decir que es uno de los pocos sectores que se han visto favorecidos indirectamente. Como cualquier manual de economía señala, ante casos de incertidumbre se dispara el ahorro y en un contexto de tipos de interés negativos donde los depósitos no ofrecen nada, los fondos de inversión han ido acumulando ese exceso de ahorro para convertirlo en inversión. Además, la fuerte corrección de marzo pasado ha dado lugar a importantes oportunidades de inversión.
¿Qué comportamiento está registrando en concreto MAPFRE AM?
El resultado es bastante positivo. Nuestro enfoque de inversión en valor junto con la filosofía de inversiones responsable nos ha permitido cerrar un año excepcional, aún a pesar de las dudas que surgieron en los primeros trimestres. Nuestras estrategias de inversión en bolsa europea han dado retornos entre el 10% y el 27% frente a un -6% del principal índice europeo. En las Estrategias más conservadoras para ahorradores el resultado ha sido también extraordinario con rentabilidades entre el +1% y +5%. Cada vez son más los inversores finales y los institucionales que quieren invertir con nosotros, en los mismos activos donde invertimos nuestro balance. Además, no es solo una cuestión de rentabilidad sino de hacer lo correcto para ayudar también a la sociedad con sus inversiones.
La pandemia ha acelerado la moda por los criterios ASG y la inversión socialmente responsable, ¿cómo aplicáis este concepto en MAPFRE AM?
Efectivamente, se ha dado un impulso a la sostenibilidad. El compromiso de MAPFRE con la sostenibilidad a través de la Inversión Socialmente Responsable (ISR) es histórico. Ya en los Estatutos de la sociedad en 1965 se formalizó que la compañía no sólo tenía que generar un beneficio, sino asumir una responsabilidad social.
¿MAPFRE AM estaba preparado para aplicar la nueva regulación europea sobre esta materia?
Llevábamos muchos años trabajando sobre la materia y hemos podido adaptarlo a la nueva regulación rápidamente. El nuevo Reglamento sobre Divulgación de Finanzas Sostenibles (SFDR), con medidas como una taxonomía común o la creación de etiquetas para productos financieros verdes, ha supuesto un cambio importante en materia de transparencia y en la mejora de la accesibilidad a los inversores que quieren invertir en estos activos de forma responsable.
¿Qué implicaciones tiene esta regulación para los clientes?
Con el auge de la ISR, ha crecido a la vez un fenómeno no deseado, el greenwashing o ecopostureo: el hacer pasar por sostenible algo que no lo es, pero puede parecerlo. De ahí que es importante que el cliente o inversor sea consciente de las compañías en las que está realmente invirtiendo su dinero. Por ejemplo, el mayor ETF Sostenible del mundo invierte principalmente en las inmobiliarios y otros activos alternativos. Contamos con una serie de productos con la denominación ISR que, además de generar rentabilidad, provocan un efecto positivo en la sociedad, como el MAPFRE AM Capital Responsable, disponible tanto en formato de fondo de inversión como plan de pensiones -recientemente ha superado los 120 millones de patrimonio- y el MAPFREAM Inclusión Responsable, el primer fondo que prima la inversión en compañías que apuestan por la inclusión laboral de personas con discapacidad.
Acaban de lanzar una nueva web, ¿qué objetivos perseguís?
MAPFRE AM es el principal brazo inversor del grupo MAPFRE, presente en 25 países, con más de 30 años de historia y que gestiona más de 40.000 millones de los 50.000 millones que administra el grupo. Es la primera gestora independiente española que prácticamente más que duplica en activos al siguiente competidor y es una historia de coinversión con nuestros clientes. Ofrecemos a los inversores que inviertan en los mismos activos que nosotros hacemos para nuestro balance, alineando intereses y siempre desde una perspectiva muy conservadora, como principal grupo asegurador español. Además, estamos inmersos en un proceso de internacionalización de nuestro negocio, mediante alianzas con los mejores socios internacionales, y de nuestros productos, con el crecimiento que está experimentado nuestra SICAV en Luxemburgo, que tiene más de 1.200 millones de patrimonio y que, recientemente, se ha registrado en Reino Unido. Por ello, necesitábamos una web que sirva de tarjeta de presentación para nuestros inversores, principalmente institucionales.
He echado un vistazo y destacáis las alianzas que habéis alcanzado con los principales socios nacionales e internacionales, ¿podría hablarnos sobre estos acuerdos?
Efectivamente, en los últimos años, hemos crecido mediante diferentes alianzas. En 2017, nos hicimos con el 25%del capital de La Financiére Responsable (LFR), una boutique con varias décadas de experiencia en el terreno de la ISR. Más recientemente, a finales de 2019, llegamos a un acuerdo con Boyar Value Group en EEUU, con el que acabamos de lanzar el MAPFRE AM Forgotten Value, un fondo que lo está haciendo espectacular este año con rentabilidades de doble dígito. Y también se está avanzando en el negocio de banca privada con la entrada en el capital de Abante Asesores, la principal gestora de patrimonios independiente en el mercado español.