Deepseek R1: ¿Amenaza o cambio de paradigma?
Redacción Mapfre
César Gimeno, gestor de MAPFRE AM
Durante los últimos meses, hemos sido testigos del crecimiento exponencial de las soluciones de inteligencia artificial, en particular de los modelos de lenguaje extensos (LLM, por sus siglas en inglés). Este crecimiento ha sido impulsado casi en exclusiva por empresas tecnológicas estadounidenses como Microsoft, Google, OpenAI y Anthropic, las cuales han destinado enormes cantidades de dinero, datos y recursos, principalmente las GPUs (unidades de procesamiento gráfico) de Nvidia para entrenar estos modelos con la esperanza de recuperar sus inversiones en el futuro.
Sin embargo, DeepSeek-R1 parece mostrar que otras alternativas son posibles. Su lanzamiento esta semana ha tenido un impacto significativo en los mercados. Nvidia cayó un 17% tras el anuncio, borrando de un plumazo 600.000 millones de dólares. Además, el Nasdaq registró una caída del 5%, y el S&P 500, el 3%, con el sector de los semiconductores registrando un desplome del 12,7%. Esta evolución ha causado incertidumbre entre los inversores y provocó un replanteamiento de las estrategias de inversión en las compañías de inteligencia artificial, tanto las centradas en hardware como las de software.
Fundada por el gestor chino de fondos de cobertura Liang Wenfeng, su enfoque ha sido radicalmente diferente:
- Un presupuesto limitado, varios órdenes de magnitud inferior al de sus competidores, con solo seis millones de dólares según sus propias publicaciones frente a los más de 100 millones necesarios para desarrollar ChatGPT-4. Además, utiliza un número mucho menor de GPUs, lo que resulta no solo en un menor coste, sino también en un menor consumo energético.
- Un modelo de desarrollo de software de código abierto, registrado bajo la licencia del MIT, que es accesible para cualquier persona.
- Un precio disruptivo, ya que ofrece acceso a la API a 0,14 dólares por millón de tokens (unidad mínima de entrada del modelo), lo que reduce significativamente la tarifa de 7,50 dólares de OpenAI para la misma cantidad de datos.
- Un rendimiento que es capaz de igualar, o incluso superar, a los mejores modelos estadounidenses en tareas de razonamiento, matemáticas y codificación.
Estos resultados ponen en entredicho la racionalidad de las inversiones multimillonarias que hemos visto anunciar recientemente, como el proyecto Stargate, liderado por OpenAI y SoftBank, que pretende invertir la friolera de 500.000 millones de dólares en IA.
Si la información sobre DeepSeek es verídica, algo que al menos en cierta medida podrá ser comprobado gracias al hecho de ser un proyecto de código abierto, supondría una alternativa abierta y eficiente para la aplicación de una tecnología que muy probablemente transformará la sociedad. Esto obligaría a los grandes actores de la industria, como OpenAI, Google DeepMind, Meta o Anthropic, a reevaluar sus estrategias para ver si siguen teniendo sentido en este nuevo entorno.
Lo que está claro en cualquier caso es que la inteligencia artificial no será un monopolio estadounidense y que la competencia está aquí para quedarse.